Asturias
Recordando……………….
A principios de la segunda quincena del mes de las flores de 2004 nos desplazamos hasta Madrid para reunirnos con JA y D y marchar hasta Asturias a pasar unos días en la casa que R tiene en una cárcava del alto de Lavadoira al lado de la carretera que une Porciles con Pola de Allande, a unos cuatro o cinco Km de esta.
La casa
Por delante de la casa pasa el camino de Santiago y en diversas ocasiones desde la ventana de la cocina o desde el borde mismo de la carretera, entablamos algún tipo de conversación con los peregrinos que por allí pasaban con relativa frecuencia.
El desplazamiento lo hicimos en dos coches, los seis integrantes que configurábamos el grupo, el Opel Corsa de D y el mío.
Hicimos un alto en la orilla del embalse de Barrios de Luna, tapizada de verdes hierbas salpicadas de margaritas, paramos a comer en Cornellana.
Otra perspectiva de la casa y embalse de B. de Luna
Durante estos días hicimos de todo un poco, realizando algunos desplazamientos por la costa así como por el interior.
Por el interior fuimos a Fonsagrada que diríase que está en el “quinto pino” ya que se encuentra bastante alejada de cualquier núcleo urbano de importancia tanto de Asturias como de Lugo; pero yo tenía ganas de ir, del pueblo no recuerdo ninguna singularidad aunque supongo que las tendrá, ha pasado mucho tiempo y los recuerdos no afloran fácilmente; recorrimos el centro y vimos un museo al que no pasamos; aquí pensaba yo que había nacido Antonio Fraguas “Forges” pero ahora al documentarme con Wikipedia , veo que no, que fue en Madrid, que el que nació aquí fue su padre; sin embargo el desplazamiento tiene otros alicientes, el recorrido discurre por un paisaje de película o documental de National Geographic; el panorama es de un atractivo fascinante, montañas y bosques de pinos, castaños, robles, hayas, abedules, brezo y otros muchos árboles y arbustos para mi desconocidos.
Se pasa por el puerto de El Palo que son 39 kilómetros entre subida y bajada desde Pola de Allande hasta la presa de Salime con una cota máxima de 1146 metros, otro de los alicientes es precisamente el embalse de Salime, donde hicimos un alto para contemplar la suavidad del azul de sus aguas, también pasamos por el puerto del Acebo con 1030 m. de altura y muchos acebos a ambos lados de la carretera. ¡Ah! y nunca se me olvidara que lo mejor de Fonsagrada fue el pulpo que tomamos ¡estaba de muerte! el ribeiro en taza, no desentonaba.
Embalse
de Grandas de Salime
Otro de los desplazamientos por el interior tenía como objetivo, ver y adquirir algunos objetos de cerámica negra, para ello nos desplazamos hasta Llamas del Mouro que es una localidad de la parroquia de San Martin de la Sierra, perteneciente al municipio de Cangas del Narcea; durante este recorrido pasamos por Jarceley y vimos el Palacio de los Sierra, al regreso también pasamos por Tuña y sin bajarnos del coche vimos algún palacio y algún cartel alusivo al General Riego; hoy sabemos que nació aquí, que destaca por el número de casonas palaciegas que alberga pertenecientes a diferentes familias nobiliarias; en el año 2000 fue Premio Príncipe de Asturias al Pueblo Ejemplar.
Por tanto se impone volver y quedarse el tiempo necesario para recorrer y empaparse de esta pequeña localidad.
Llamas del Mouro, cerámica negra
Donde se unen la carretera que viene de Pola de Allende AS-14 con la que viene de Cornellana AS-15 poco después de Tebeongo, se encuentra el puente del Infierno, todo este tramo del rio Narcea, desde Tebongo hasta el puente del infierno, me resulta muy familiar porque aquí es donde venía a pescar truchas cuando vivíamos en Langreo (La Felguera) y donde estos días he vuelto a practicar la pesca de la trucha con mosca seca.
A unos nueve kilómetros de Tebongo se encuentra Corias donde nos desplazamos otro día con la intención de visitar el entonces Monasterio de Corias, hoy parador nacional, que se encuentra a la entrada del pueblo al lado de un pequeño puente ¿medieval?, un monje nos lo estuvo enseñando, recuerdo que le pregunte por unos árboles enormes que había, supongo que los seguirá habiendo, en un patio interior, me dijo que eran araucarias, si no recuerdo mal.
Monasterio de Corias, ahora Parador Nacional
Después de salir del monasterio pasamos a un “chigre” que había en las proximidades del mismo y nos pusimos “moraos” de cecina, chorizo, jamón y queso a un precio muy asequible.
Otro día N y yo nos desplazamos
hasta la aldea de Lago que dista 12 km de Pola de Allande, en dirección a
Grandas de Salime, para ver el tejo centenario que hay junto a la pequeña
iglesia románica de esta aldea. http://www.asturnatura.com/naturaleza/tejo-de-lago.html
El tejo (Taxus baccata) tiene un significado mágico. Todas las partes del árbol, a excepción del arilo de las
bayas, contienen un potente veneno, la taxina,
y apenas hay ermita o capilla que se precie que no tenga o haya tenido en su
proximidad un gran ejemplar de tejo.
Monasterio de Corias y Tejo centenario de Lago
Sólo eso, ha servido para estimular la imaginación de los cronistas locales que han mencionado el papel de la taxina en primitivos aquelarres, el envenenamiento de las puntas de las flechas que los astures lanzaron sobre las tropas de Augusto y el carácter mágico del tejo para los primitivos celtas, carácter que los primeros cristianos quisieron amortiguar emplazando en los lugares sagrados de los paganos ermitas y capillas. Lo cierto es que de todo ello poco se sabe, pero aún hoy es frecuente la conjunción de pequeñas ermitas a la sombra de tejos centenarios.
Es un árbol muy estimado en jardinería por su valor ornamental y también por el valor estético de la madera ante la forma de sus vetas. Ésta es muy dura y compacta, de gran duración al ser imputrescible. El color de la albura es blanco marfil, siendo el duramen de color rojizo en el momento del corte y pardo rojizo una vez seco. Es muy estimada en ebanistería y fue utilizada en la antigüedad para la fabricación de arcos. Se usa en tornería, talla, en la elaboración de mangos de herramienta o utensilios de cocina. El arco de Ulises ¿de qué era sino?
Parajes de Carondio y Valledor
No dejare de mencionar la belleza paisajística de las sierras de Carondio y Valledor, por donde hemos transitado más de una vez.
http://www.asturias.es/portal/site/infoAsturias/menuitem.c83ef88008e6e76cb5dd591088414ea0/?vgnextoid=36057a3796b90210VgnVCM100000dc14e40aRCRD
El último desplazamiento por el interior nos llevó hasta Cangas del Narcea por donde hicimos un pequeño recorrido turístico.
Cangas del Narcea
Independientemente de las veces que fui a pescar, que lo hice solo, también hicimos senderismo, unas veces unos cuantos, otras todos, excepto R que por su edad cercana en aquel momento al siglo de existencia, hoy lo sobrepasa, es obvio que no era factible.
Producto de unas horas de pesca en el rio Narcea
El resultado de otro día de pesca en el mismo lugar
Anduvimos por la parte alta o por la baja y pasamos por el camino de Santiago que discurre por el camino del viejo y derruido molino de agua. En Porciles el camino de Santiago se bifurca durante un par de kilómetros o poco más, uno va por la carretera y otro por el camino del molino como ya se ha dicho.
Entre hayas
Senderismo por las proximidades de la casa
Una de las veces que anduvimos por el monte entre hayas, encontramos una cría de rebeco agazapado entre la verde hierba de una pequeña vaguada, como es natural, luego lo dejamos otra vez donde lo encontramos.
Las hayas son la leyenda.
Alguien, en las viejas hayas,
leía una historia horrenda
de crímenes y batallas.
¿Quién ha visto sin temblar
un hayedo en un pinar?
Antonio Machado.
Con una cría de rebeco
A la costa hicimos una sola salida, recorrimos en un mismo día Ribadeo, donde comimos, Tapia de Casariego, Navia donde tomamos algo y Luarca.
Ribadeo
Ribadeo y Tapia de Casariego (faro)
Luarca
Un día que lo pasamos en casa fue el 22 de Mayo, recuerdo que llovía mucho y quedó en nuestro recuerdo porque fue cuando se celebró la boda en la Catedral de la Almudena, Madrid, entre el Príncipe Felipe de Borbón y la hasta entonces periodista Leticia Ortiz. Ahora son los actuales Reyes de España.
N y yo regresamos unos días antes y decidimos hacerlo pasando por Ponferrada, con el fin de recordar viejos tiempos, no en vano vivimos allí unos cinco años, para ello tuvimos que salvar dos grandes puertos, el del Rañadoiro, (en Enero de 2010 se ha inaugurado el túnel del Rañadoiro que forma parte de la futura autovía Oviedo- Ponferrada y que abre una nueva puerta de Asturias a la meseta y viceversa) 1181 metros, bordeando el bosque de Muniellos que estaba cubierto de niebla y el puerto de Cerredo, 1359 metros situado entre Degaña y Villablino, también pasamos por la sierra de los Ancares.
En Ponferrada hicimos un recorrido por el centro: plaza del ayuntamiento, torre del reloj, plaza de la Encina, basílica de la Virgen de la Encina, museo de la radio Luis del Olmo, castillo de los templarios, parque El Plantío etc.
Ponferrada, ayuntamiento y torre del reloj
Constatamos que habían eliminado
la montaña de carbón y que en las proximidades habían construido el nuevo
estadio de fútbol de la Ponferradina; también en el centro habían montado un
elevador.
Continuamos el viaje y paramos a comer en Arévalo, lo hicimos en el restaurante asador Las Cubas, todo un referente en Arévalo, tuvimos que esperar un rato hasta disponer de mesa, luego el cochinillo estaba para chuparse los dedos.
Arévalo, restaurante Las Cubas
Hicimos un poco de turismo por la atractiva ciudad para a continuación regresar a Puertollano.
Arévalo, iglesia de Santa María la Mayor y torre de la misma con
pasadizo inferior.
Arévalo, iglesia de San Martín y castillo
Six year later………………..
El día 16 de Junio de 2010 sobre las 18:30 salimos de Puertollano con dirección a Madrid; después de ver a Margarita en Ciudad Real, en la salida de la carretera de Toledo y a Paloma en Madrid; sobre las 22 horas nos encontrábamos en la dirección de Riocabado.
El viaje lo hicimos en el volkswagen touran de D.
Al día siguiente serian poco más de las nueve de la mañana cuando salimos de Madrid, llegando al alto de Lavandoira pasadas las cinco y media de la tarde.
Durante el trayecto paramos a tomar un café en Rueda, famosa por sus vinos blancos y más tarde hicimos un alto en el embalse de Barrios de Luna.
La comida la hicimos muy cerca ya de nuestro destino, en Cabruñana. Comimos estupendamente por 40 € los cinco, mientras veíamos por TV las noticias nada alentadoras, concernientes a los daños causados por el reciente temporal en las playas a las que en días posteriores pensábamos desplazarnos.
Tres peajes pasamos antes de llegar al destino final, Madrid 9,55 €, León 10,00 € y Asturias 10,60 €.
El viernes por la mañana mientras JA se queda en la casa entretenido en pequeños quehaceres domésticos, tal vez del entorno, los demás nos vamos al mercadillo de Pola de Allande.
El sábado tocaba visita turística; por la muy accidentada AS-14 nos dirigimos hasta Grandas de Salime donde visitamos el museo etnográfico, el más completo de todos los que he visto, una maravilla.
Grandas de Salime, museo etnográfico
Grandas de Salime, museo etnográfico
A continuación siguiendo
sucesivamente la AS-12, AS-13, AS-11, AS-26 y AS-21 llegamos a Taramundi,
famosas son las navajas con esta denominación; aquí comimos, pagando 75 € por
los cinco cubiertos.
Por la tarde nos fuimos a ver los ingenios hidráulicos de Teixois. El conjunto Etnográfico de Teixois ha sido declarado bien de interés cultural.
El cartel lo dice todo
Se encuentra a menos de 4 Km de
Taramundi y además de ver en acción todos los ingenios, movidos o accionados
por el agua del arroyo das Mestas, a saber: mazo, molino, rueda de afilar, pequeña central
eléctrica y un batán; podemos admirar el bello paisaje y
tomarnos un refresco en el restaurante que hay junto al conjunto, e incluso
comer.
Conjunto etnográfico Teixois
El regreso al alto de Lavadoira lo hicimos por la costa, desde Taramundi nos dirigimos a Ribadeo para coger la E-70 hasta las cercanías de Luarca, desde donde por la AS-219, pasando por Navelgas, donde en el rio del mismo nombre, aún hoy, o por lo menos en aquel momento, se seguía buscando oro, llegamos a nuestro punto de partida.
Después de dos días de
tranquilidad en Lavadoira, que dedicamos a pasear, hacer senderismo por los
alrededores y a compartir café, tertulia y cartas con los vecinos, JA en
diferentes momentos se encargo de desbrozar el área cercana a la casa, quitar
las hierbas, cortar leña y aprovisionarla para el tiempo frio; en virtud de lo que habíamos programado ( las
chicas querían playa), el segundo de ellos nada más comer, nos desplazamos
hasta Luanco donde previamente habíamos reservado alojamiento en el hotel La
Plaza en el centro de la ciudad.
En la cocina de la casa con Atilano, Josefina y Pilar (vecinos)
Antes de llegar a nuestro destino, hicimos un alto en Avilés, entramos en el Parking subterráneo de la Plaza de España y nos sentamos en una terraza de la misma a tomar unos refrescos, luego paseamos por el centro viendo el ayuntamiento, la Iglesia de San Nicolás de Bari, la pintoresca calle Galiana y el frondoso Parque Ferrera.
Con el horizonte tapizado por los colores rojizo y amarillo sanguinolento del ocaso llegábamos a Luanco.
Cenamos en La Marina, 16 € por persona; en el hotel, solo habíamos reservado alojamiento y desayuno.
Al día siguiente paseamos tranquilamente por el centro de la ciudad, pasando a la iglesia Parroquial de Santa María de la Anunciación, y viendo exteriormente la Casa de los Menéndez de la Pola, la Torre del Reloj y la playa de la Ribera; cuando lo creímos oportuno tomamos unos refrescos sentados en una terraza y la comida la hicimos en La Cueva.
Por la tarde fuimos a la playa de la Marina, que es como se llama la playa de Luanco y pude comprobar que el agua no estaba tan fría como yo me imaginaba; esta playa fue regenerada en 1995 con arenas extraídas de los fondos del litoral de la zona, en una operación que incrementó de forma sustancial su superficie y creó una zona permanentemente emergida (antes las pleamares cubrían todo el arenal); una explanada artificial a modo de solárium ocupa el área de posplaya, y por encima de ella existe un paseo marítimo que llega hasta El Cabildo.
Es la playa más importante del concejo, no en vano cuenta con todo tipo de servicios. Conocida como "Playa de Luanco", su nombre es Playa de La Marina. En ella llama la atención, por su colorido, la serie de casetas para cambiarse que están ubicadas en la postplaya, tras la explanada artificial.
Un hermoso paseo litoral, desde el puerto viejo hasta la playa de La Ribera, la recorre por completo y dota al conjunto de una inusitada actividad en todas las estaciones del año. El puerto viejo la guarece por su margen Occidental, siendo un espigón la que lo hace en el Oriental. Actualmente un amplio y nuevo puerto ha sido construido al oeste del puerto viejo.
Le ha sido concedida la bandera azul los años 2007, 2008, 2010, 2011 y 2012.
La cena fue en el restaurante Isla del Carmen; ya por la noche acudimos a la playa de la Ribera donde la asociación “Amigos de la Ribera” organizó la noche de San Juan; en la arena de la playa había montado una especie de castillete de madera al que se prendió fuego (hoguera de San Juan) cuando las llamas devoraban las últimas tablas y el castillete se desplomaba sobre la arena, se empezó a repartir vasitos de queimada que había sido hecha para todos los asistentes, 1 € el vasito de barro que pasaba a ser de tu propiedad, el liquido gratis
A continuación dio comienzo la verbena amenizada por la orquesta Versión Original.
En este lugar se localizo en la Edad Media el antiguo Puerto Ballenero de Luanco y posteriormente se instalo el balneario "La Rosario”. En la actualidad en este lugar se celebra todos los años el Torneo Internacional de Tenis "Playa de Luanco”, único en el mundo por disputarse en pista de arena de playa.
Los días sucesivos realizamos diversas salidas; la primera fue a Gijón; aparcamos en el Parque de Isabel la católica y mientras las chicas se van a tomar el sol a la playa de San Lorenzo, JA y yo paseamos por el barrio de la Arena.
Gijón, playa de San Lorenzo, al fondo iglesia de San Pedro y monte de
Santa Catalina
Comimos en un pequeño restaurante
de la calle Emilio Tuya, 8,5 € el menú.
Por la tarde, viendo que mucha gente tomaba el sol con sus atuendos veraniegos sobre el césped del parque de Isabel la Católica, decidimos imitarlos, unas tomando el sol para incrementar el incipiente moreno recién adquirido y otros la sombra para tranquilizar al exasperante Morfeo que a esa hora se encontraba muy inquieto.
Poco después nos dirigimos al parking subterráneo del paseo Begoña y tomamos unos cafés en el Gran Café Dindurra, todo un clásico en Gijón.
Luego JA y las mujeres se fueron a visitar a una tía de este, y como no, a hacer shopping.
Yo tome un autobús y me reuní con Julián y con Herminio en un bar cercano a la plaza de toros, donde rememoramos tiempos pasados, no pudiendo evitar la evocación de algunos compañeros que se fueron. Charlamos de todo un poco de forma tranquila y distendida.
Volvimos a reunirnos y continuamos callejeando, cenamos donde pillamos, lo que a esa hora se ofrecía, era tarde.
Sobre la una de la noche llegábamos a Luanco.
Cabo Peñas
Otro día visitamos a los primos de JA, Benigno y Julia que tienen una casa rural cerca de Luanco y se dedican a la cría de terneros, luego nos acercamos hasta el cabo Peñas y recorrimos los acantilados y zona protegida, para a continuación emprender el camino hacia Cudillero.
Cudillero, plaza
Cuando alguien te habla de Cudillero lo primero que antepone es el gentilicio de sus habitantes: pixuetos, no sé porque pero es así, dicen que deriva de pix (pez) o bien de pixín (rape); todo ello no hace sino acentuar el encanto de este pintoresco pueblo de pescadores, con casas de colores arracimadas en las laderas de tres montañas en torno a una encantadora plaza, donde puedes degustar el excelente marisco y pescado de la zona en cualquiera de los diversos restaurantes que hay en torno a la misma.
Cudillero
Bajamos al pueblo por el centro, por la entrada antigua, cruzamos la plaza y aparcamos en el parking del puerto.
Cudillero, mirador en día con niebla
Luego hicimos un pequeño recorrido por el centro, para después apretar los dientes y adentrarnos en el intrincado laberinto de escarpadas escaleras que conducen a la mole cilíndrica de hormigón que es el mirador, con su escalera metálica de caracol; de regreso a la plaza se imponía elegir restaurante para comer, ¿pero cómo lo hacíamos? si el aspecto de todos ellos, la carta y los precios parecían idénticos; aceptamos la recomendación de los conocidos que fue esta: si vais a comer el menú cualquiera de los de la plaza es bueno, pero si lo que deseáis es hartaros de buen marisco lo mejor es que vayáis a El Faro.
Cudillero, faro
Estuvimos en la entrada de El Faro, pero como ese día no tocaba hartarse de marisco, volvimos a la plaza donde por 12 € tomamos el menú del día que incluía pescado y marisco, en uno de aquellos restaurantes.
Cudillero, faro y pueblo
Consultada la lista de los mejores restaurantes de Cudillero en primer lugar figura Cabo Vidio, El Faro, figura en el octavo lugar de un total de 28, según TripAdvisor.
Por la tarde dimos una vuelta por el puerto y subimos hasta el faro.
El sábado día 26 nos desplazamos hasta Cándas donde en un área céntrica había un mercadillo muy típico, era una especie de mercadillo medieval – regional, con algunos animales y un grupo de danza folclórica, este mercadillo en parte era interactivo y en él nos adentramos, mezclándonos y confundiéndonos con la gente del entorno.
Cándas, grupo folclórico regional y mercadillo
Comimos en un restaurante de Cándas 12 € menú, por la tarde tomamos el sol en la playa y sinceramente, pasamos frío.
Vetusta no, Cándas, junto a Clarín y la Regenta
De regreso en Luanco y después de una buena ducha nos dispusimos a visitar a Baldomero; para ello nos desplazamos hasta El Berrón y sin dificultad alguna llegamos a la espléndida casa de este, acogiéndonos con la familiaridad que le caracteriza, nos mostró su nueva casa y luego nos invitó a cenar, después estuvimos charlando largo tiempo, como era de esperar la comida fue acompañada de un magnifico vino, de los que él siempre está bien surtido.
En casa de Baldomero
El último desplazamiento por
Asturias, nos llevó a la capital del principado, Oviedo, paseamos por el
centro, Teatro Campoamor, Parque de San
Francisco, Plaza de la Escandalera, calle Uría, Catedral etc.
Oviedo, escultura a la maternidad y grupo de danzas regionales, en la
plaza de la Escandalera
En la Plaza de la Escandalera
contemplamos la actuación de un grupo folclórico regional.
Oviedo, sentados con Luis Riera y
junto a la escultura de hombre sobre delfín de Salvador Dalí
Dos lugares muy emblemáticos que yo no conocía son los siguientes: Uno la estación del Norte o simplemente estación de Oviedo, que está situada al final de la calle Uría y es una magnifica estación de ferrocarril que todo visitante debiera conocer, así como la amplia zona exterior de la misma, comprendida entre la calle de los Pilares y la avenida Fundación Príncipe de Asturias, con el HOTEL- AC-FORUM-OVIEDO en uno de los costados, debajo un mercadona; el espacio ganado sobre las vías da lugar a una amplia plaza llamada de los Ferroviarios que ha sido adornada con fuentes y diversas esculturas: Paz y Libertad, de Luis Sanguino y Hombre sobre delfín, de Salvador Dalí. No son las únicas esculturas del recinto ya que frente al antiguo edificio existe también una obra de José Noja titulada Asturias. No muy lejos de la estación de ferrocarril se encuentra la moderna estación de autobuses construida en 2003.
Plaza del Fontan
El otro lugar al que hacía
mención no es otro que el mercado y Plaza del Fontan, este es un lugar con un
encanto arrebatador, la plaza es alargada y porticada, está llena de mesas y sombrillas y es uno de los lugares
más seductores de Oviedo, lugar idóneo para comer, con mil sitios donde
degustar la comida típica asturiana y su embajadora, la sidra.
Plaza del Fontan,
mercado e iglesia de San Isidoro
Aquí fue donde comimos, el nombre del restaurante no lo recuerdo, el precio si figuraba en mis notas, 12 € menú.
En un restaurante de la plaza del Fontan y sentados en la fuente de la
plaza de la catedral
Después de comer regresamos a Luanco; D y S se fueron a la playa los demás nos quedamos reposando.
Cenamos en el restaurante Robus que es propiedad del dueño del hotel La Plaza, Robustiano, de ahí el nombre del restaurante, 190 €/5 personas.
Poniéndonos bien en el restaurante Robus y hotel La plaza (Luanco)
El día 28 lunes después de desayunar salimos para Madrid; en Arévalo paramos a comer, nos dirigimos al asador restaurante las Cubas, pero estaba a tope y tuvimos que desistir, lo hicimos en el asador restaurante Siboney, Cochinillo y cordero, 150€/5.
Sin el cartel de Las Cubas, El Siboney es un magnifico asador restaurante que no nos decepcionó.
Luego recorrimos el centro de Arévalo.
El día de la partida Robus nos regaló doce botellas de sidra; en el Siboney nos regalaron dos de vino (no excesivamente bueno) una se rompió en el ascensor de Riocabado, en Madrid.
El día siguiente había huelga total de metro en Madrid; pasamos el día en casa de JA y D.
Salimos para Puertollano a las 18:15 llegando a nuestro destino a las 20:45.
No quiero terminar este relato
sin una mención especial para la persona designada como R (Ramira) que aparece
en una de las primeras imágenes y que ya no está entre nosotros, q.d.e.p. pero
pasaba de los 100 años de edad y es ley de vida que ello ocurra.
Puertollano 17 de agosto de 2013.
¡¡Que bien lo pasamos ese año!!!, y lo bien que se te dieron la trucha de la pinta roja, fueron tantas que regalamos .
ResponderEliminarLos ríos limpios y transparentes reflejaban en sus aguas cristalinas las truchas de todos los tamaños.
Ese año volvimos a descubrir esa maravillosa Asturias por segunda vez.
Es la trucha autóctona, Salmo trutta fario, con una librea preciosa. Seguiremos visitando Asturias en un futuro no muy lejano. Gracias
Eliminar